El acceso al agua continúa siendo uno de los mayores retos a los que se enfrentan las comunidades rurales. A pesar de los esfuerzos por cambiar esta situación por parte de los estados, la respuesta más acertada suele estar en manos de los gobiernos municipales y comunidades. Y es precisamente esta realidad, la que llevó a Fundación Natura Bolivia a trabajar con los gobiernos municipales y cooperativas de agua locales para implementar soluciones tangibles y adaptadas a cada contexto. Es así que nuestro modelo de trabajo denominado Acuerdos Recíprocos por Agua (ARA) ha resultado exitoso en nuestros 18 años de recorrido.
Los ARA son un modelo de trabajo que destaca por su sencillez y su capacidad de adaptarse a cada contexto.Los ARA básicamente integran a poblaciones de cuenca alta y cuenca baja, mediante acuerdos de reciprocidad que permiten consolidar acciones de conservación de bosque y manejo sustentable de los recursos hídricos, del que se beneficia toda la población. Para nosotros el mayor logro es que las comunidades y municipios se apropien, lideren y repliquen el modelo más allá.
Es por eso que nace la escuela ARA, con el objetivo de formar a líderes locales y actores claves de entidades públicas y/o privadas vinculadas a la conservación,que implanten este modelo en sus comunidades. Esta gestión debido a las circunstancias actuales y buscando salvaguardar la salud de nuestro equipo y participantes hemos ideado nuevas formas de inspirar a líderes. Por primera vez la versión 2021 de la Escuela ARA fue completamente virtual.
Con un total de 20 participantes de todo el país, la escuela ARA se desarrolló del 27 al 30 de abril del presente año.Estuvo a cargo de Daniela Salvatierra,coordinadora de la Escuela ARA quien elaboró el taller y seleccionó a los participantes más adecuados al perfil. El proceso también contó con el apoyo de Paulina Pinto y su amplia experiencia en implentación de ARA´s. Las veinte personas seleccionadas tienen competencias diversas, desde servidores públicos, miembros de organizaciones no gubernamentales y miembros de asociaciones de regantes. Cada uno desde su contexto elaboró un proyecto basado en el modelo ARA, y que con el apoyo de la escuela planea ser implementado.
Pese a las limitaciones que puede ofrecer la modalidad virtual nuestro equipo hizo un enorme esfuerzo por transmitir su experiencia y conocimientos a los nuevos líderes. Esta fue una escuela llena de aprendizaje, no sólo para los alumnos, sino para la misma institución que busca superarse e innovar constantemente. Nuestra necesidad de adaptarnos a los nuevos tiempos,nos invita a indagar nuevas vías para llegar a cada vez más personas.